Perfil - Cortney Freshwater - Maryknoll Lay Missioners
2341
Home » Misioneros » Perfil – Cortney Freshwater

Cortney Freshwater

 

Año de ingreso a  MKLM: 2018

País: Bolivia

Ciudad: Cochabamba

Apostolados: La Casa de Los Niños and Hogar San José

Enfoque: Educación, Cuidado y atención Pastoral

Objetivos del apostolado: Ayudar y proporcionar recursos educativos a niños con discapacidades, así como también acompañar a ancianos y ancianas para mejorar la calidad de vida de ambos grupos

Contexto de apostolado:

La Casa de los Niños es una pequeña comunidad situada en la ciudad de Cochabamba donde familias pobres cohabitan y comparten vivienda. Muchas de las familias tienen niños con dificultades de aprendizaje, problemas de conducta o con discapacidades entre moderadas a severas, por lo que han sido negados a acceder a la escuela pública. Es así que los niños asisten a la escuela alternativa (La Casa de los Niños) dentro la comunidad, donde reciben diferentes oportunidades de aprender.

El Hogar San José es una casa o una enfermería pública para ancianos y ancianas en la ciudad de Cochabamba. La mayoría de los 150 hombres y mujeres que viven en este hogar no tienen familia, vienen de la calle y/o sufren alguna forma de deficiencia física o mental.

Apostolado actual:

En la Casa de los Niños, trabajo en la sala sensorial con niños con varias discapacidades. Trabajo individualmente con estudiantes con diferentes capacidades de aprendizaje, sensoriales y motrices; practicamos métodos de comunicación; nos enfocamos en necesidades sociales y de conducta; y desarrollamos destrezas que se necesitan tanto en la clase como en la vida diaria. Por ejemplo, cuando trabajo con mis estudiantes con síndrome de Down, nos enfocamos en escuchar y compartir pero también en otras destrezas básicas como: identificar letras, números, colores y aprender a usar las capacidades motrices. Con algunos de mis estudiantes con discapacidades severas, simplemente uso terapia de música o aplico puntos de presión. Hago esto toda la mañana hasta la hora del almuerzo, que es cuando ayudo a algunos de mis propios estudiantes a enfocarse en comer su almuerzo. Luego, voy a correr y jugar por todo lado con todos los niños en el recreo, donde básicamente me convierto en una barra humana de gimnasia o en una contadora incansable de juegos de escondite.

Este trabajo es obviamente basado en educación y enfocado en mejorar la calidad de vida de aquellos con discapacidades en la escuela y en el hogar. En este trabajo sin embargo, hay mucho más amor del que pueda ser visto o expresado en un papel. Las sonrisas, risas y abrazos que recibo diariamente significan para mí mucho más que cualquier cosa , especialmente sabiendo que algunos de mis estudiantes han sufrido varios tipos de abuso. Mi apostolado es usar mi formación académica para ayudar a mejorar sus vidas, pero de un modo más importante a través del amor que siento por ellos.

En el hogar San José, trato de acompañar tanto a los residentes como al personal. Lo hago ayudando a servir y a alimentar a los residentes en diferentes momentos de la cena, ayudando a limpiar una vez que termina la misma y haciendo lo que se necesita en cualquier momento. Acompaño a los residentes simplemente compartiendo conversaciones, momentos de silencio, risas, a veces incluso lágrimas. Estos momentos suceden mientras me siento afuera y comparto historias con la misma mujer cada día; mientras ingreso al comedor y saludo a cada persona una por una; o cuando cuidadosamente aplico gotas en los ojos de una mujer; y suceden cuando ayudo a una mujer con su rutina de cada noche. Mi objetivo es que mi presencia ofrezca una sensación de aceptación, amor, y amistad para todo aquel con quien me encuentre en el hogar San José, considerando especialmente que muchos de ellos no tienen el amor de una familia.

Datos personales:

Después de graduarme de la universidad John Carroll, decidí hacer un año de servicio con los Passionist Volunteers en Mandeville, Jamaica. Durante mi estadía allí, trabajé en una pequeña comunidad rural y una posta de salud pública donde mi único propósito era acompañar a la gente en su día a día y a construir relaciones perdurables. Era un tipo de servicio diferente, al cual no había sido expuesta en los Estados Unidos y me encantó completamente. Regresé a Ohio para enseñar en segundo grado por dos años, continué como voluntaria en un asilo local, lo cual también me gustaba mucho hacer, sin embargo sentía que estaba llamada a hacer algo más.

Después de investigar un poco, me topé con el programa de Maryknoll Lay Missioners y me contacté con alguien en admisiones simplemente para escuchar las respuestas a unas cuantas preguntas. Inmediatamente me sentí como en casa y supe que, era hacia este programa basado en la fe y a largo plazo, donde mi corazón me estaba guiando. Gracias a mi formación académica en educación, mi experiencia de trabajo con ancianos personas discapacitadas y mi pasión por ambos, pude encontrar aquí dos apostolados que responden al llamado que siento tan profundamente. Me siento increíblemente bendecida por trabajar con la gente en la Casa de los Niños y el hogar San José, mientras continúo entablando relaciones, compartiendo y aprendiendo de quienes están a mi alrededor y creciendo cada día en mis pasiones y en el amor.