Larry Parr
Año de ingreso a MKLM:2007
País: El Salvador
Ciudad: Las Delicias
Enfoque: Justicia y Paz
Proyecto(s): Desarrollo comunitario Las Delicias, FUDESCA (Fundación para el Desarrollo y la Solidaridad Cástulo Antonio)
Población a la que sirve: Familias y jóvenes de la parroquia Las Delicias
Descripción: acompañar y fomentar a líderes que trabajan por el cambio, crear y mejorar proyectos sostenibles para mejorar la comunidad
Objetivo(s) del proyecto:
Acompañar a la gente en su recorrido de trabajo, juntos como líderes por el cambio y crear y mejorar proyectos auto sostenibles para mejorar su comunidad y a sí mismos.
Apostolado actual:
Larry sirve en Las Delicias, un pueblo rural, localizado a 45 minutos de ciudad capital. La comunidad de 600 familias originalmente contaban con los ingresos de la industria del recojo de café. En años recientes, el trabajo ha disminuido y los residentes se han quedado sin medios de mantenerse a sí mismos.
En busca de trabajos, los proveedores principales de ingresos inmigran a los EE. UU. Las familias se fragmentan y sufren sus efectos dolorosos. Los niños que se quedan sin un padre, frecuentemente se unen a pandillas las cuales les dan una falsa sensación de seguridad y malos modelos a seguir. Las familias se preguntan de dónde obtendrán su próxima comida. Con frecuencia el stress conduce al alcoholismo, abuso doméstico y disfunción familiar. Muchos residentes sufren la falta de educación, mala salud y alimentación, y desempleo. Algunos tienen un trabajo en una fábrica y otros buscan empleo en el area agrícola o doméstica, donde ganan menos de $4 al día.Otros no pueden encontrar trabajo y se esfuerzan para suplir a sus hijos de las necesidades básicas escolares y alimentación para sus familias. Los niños están malnutridos y muchos estudiantes abandonan la escuela por razones económicas. Hay escasez de agua y durante la época seca cada familia recibe agua solamente una vez por semana.
Larry trabaja con FUDESCA, una fundación creada por los miembros de la Iglesia Católica Las Delicias, para fortalecer la comunidad a través del desarrollo y la educación. Él y junto a los líderes locales, ayuda a otros a cultivar sus cualidades de liderazgo y trabajar en proyectos para mejorar la comunidad. El enfoque de cada proyecto es potenciar las habilidades grupales y promover independencia financiera y social. La comunidad ha construido construido una biblioteca, muy frecuentada, donde ofrecen clases de computación, arte, música y baile; así como también clases individuales y un programa de agricultura.
Larry coordina el programa de becas que dota de $30 mensuales para costos de transporte a estudiantes de 5 universidades y 7 colegios secundarios. El programa apoya y acompaña a los jóvenes en sus jornadas por alcanzar sus objetivos y construir una mejor vida para sus familias y su comunidad. Mensualmente los estudiantes participan en encuentros de oración y reflexión, en formación de liderazgo y eventos sociales.
Otro aspecto de los programas educacionales en la comunidad es el programa de enseñanza del Padre Dean Brackley. Este programa envía a más de 30 estudiantes de Las Delicias a la Universidad Centroamericana cada sábado para recibir enseñanza individualizada que les ayuda a alcanzar sus potenciales y prepararlos académicamente y poder concursar de programas de becas y así asistir a la universidad.
Debido a las condiciones de pobreza, hay una carencia de lugares seguros de juego. Esto resulta en actividades desestructuradas, e inseguras que llevan a la posible influencia sobre los niños y jóvenes de miembros de pandillas. Jugando para la Paz (Playing for Peace) es una iniciativa comunitaria orientada a prevenir las pandillas. El objetivo es ayudar a niños y jóvenes a convertirse en adultos bien formados. Jugando para la Paz se ha expandido para incluir partidos de fútbol supervisados por adultos. Los entrenadores, jóvenes del lugar que juegan fútbol y estudian o trabajan son un modelo positivo para los niños. Más de 60 niños y niñas entre 6 y 24 años, juegan y aprenden habilidades de trabajo en equipo, de un modo divertido, seguro, en un ambiente estructurado y participan juntos en eventos de formación de paz y de oración.
Larry afirma, «Nuestro lema es «Dios, Estudios, Deportes,» porque creemos que enfocándonos en estos tres elementos podemos ayudar a la gente joven a cambiar sus ideas negativas y trabajar para construir una cultura de solidaridad y amor para los demás.»
Larry participa del Programa Alternativas a la Violencia (AVP por sus siglas en inglés) y dirige talleres de formación para jóvenes en riesgo y otros grupos. AVP es un programa de transformación de conflictos gestionado por voluntarios. Facilitadores formados de AVP dirigen talleres prácticos para desarrollar las habilidades de los participantes para resolver conflictos sin recurrir a la manipulación, coherción o violencia. AVP en El Salvador ha realizado talleres con comunidades locales, escuelas, centros de detención juveniles, y parroquias. Ayuda a crear una cultura de paz y compasión a lo largo del país.
Datos personales:
Larry es de Baltimore, MD. Es titulado de la universidad Loyola de Chicago en Estudios Internacionales y Ciencias Políticas, y en Castellano y Estudios Latinoamericanos, también tiene una maestría en Teología Latinoamericana de la Universidad Centroamericana, San Salvador, El Salvador. Durante sus estudios de pre-grado Larry asistió a la Universidad Alberto Hurtado en Santiago, Chile, donde trabajó como voluntario en el Hogar de Cristo, un centro de acogida para hombres sin hogar.
Larry trabajó con inmigrantes hispano hablantes y enseñó inglés y dió entrenamiento para el examen de ciudadanía. Junto a Chicago Interfaith Worker Justice, Larry asesoraba a los trabajadores sobre sus derechos legales y sus opciones y era un defensor de los derechos de los trabajadores por mejorar sus beneficios, condiciones de trabajo y salarios. Fue miembro de la Parroquia San Pío X.
